Fraude Kickstarter: Washington presenta primera demanda de protección al consumidor que involucra al crowdfunding
Si solicitas dinero por medio de Kickstarter, y no entrega el producto o servicio que se prometió, el gobierno de EEUU actuará de oficio. En la primera demanda de protección al consumidor que involucra al crowdfunding, el Fiscal General del Estado de Washington Bob Ferguson presentó una demanda en contra de Ed Nash y su empresa Gestión Altius con domicilio en Nashville (Tennessee).
Ya en octubre de 2012, Nash consiguió $25.146 USD a partir de 810 patrocinadores: – incluyendo por lo menos 31 de Washington – para un juego de cartas llamado «Asylum», diseñado por un artista serbio y gestionado por Nash. La campaña superó su objetivo de financiación, que estaba en $15.000 USD, lo que significa que Nash era legalmente responsable por el envío de cada respaldo de los productos por los que pagaron.
Pero a medida que la fecha de entrega estimada en diciembre 2012 pasó, los clientes nunca recibieron el producto «Asylum». En los meses siguientes, los patrocinadores enojados expresaron su frustración en los hilos de comentarios de la página de Kickstarter.
Según la demanda, tanto Nash como la empresa Altius no se han comunicado con los patrocinadores desde julio de 2013. La oficina del Procurador General busca una restitución para los patrocinadores, así como $2.000 USD en multas civiles por la violación de la Ley de Protección al Consumidor, y el dinero para cubrir costos y honorarios de abogados.
«Los consumidores deben ser conscientes de que el crowdfunding no está exento de riesgo», dijo Ferguson en un comunicado. «Esta demanda envía un mensaje claro a las personas que buscan dinero de los consumidores: el estado de Washington no tolerará el robo a través del crowdfunding. La Oficina del Procurador General de la Nación llevará a juicio a los responsables que no juegan con las reglas establecidas».
Joe Wallin, un abogado con sede en Seattle Davis Wright Tremaine, dijo que no está sorprendido por las acciones de la Procuraduría General. «Si las personas engañan y defraudan a las personas, que pueden esperar que el gobierno tome acción», dijo Wallin.
Kickstarter señala que la empresa «no garantiza los proyectos, ni investiga la capacidad de un creador para completar su proyecto.», sin embargo, sus «Términos de Uso» no tienen en cuenta la obligación legal de las personas para entregar su producto en caso de financiación.
¿Está un creador legalmente obligado a cumplir las promesas de su proyecto?
Sí. Los Términos de uso de Kickstarter obligan a los creadores a cumplir con todas las recompensas de su proyecto, o el reembolso a cualquier patrocinador cuya recompensa no haya sido satisfecha, o no se pueda cumplir. (Esto es lo que los creadores ven antes de que lancen su campaña). Esta información puede servir como base para un recurso legal si un creador no cumple sus promesas. Esperamos que los patrocinadores consideren el uso de esta disposición sólo en los casos en que sienten que un creador no ha hecho un esfuerzo de buena fe para completar el proyecto y cumplir.
Y mientras, los denunciados…
El sitio web de la empresa «Altius Management» está en blanco (aunque desde España y Colombia parece tener algo de contenido desde su home) aunque algunas subpáginas siguen en línea. La página de la compañía en LinkedIn lo describe como «entretenimiento y gestión de artistas, y firma de servicios completos.» Nash, por su parte, sigue apareciendo como el presidente de la compañía en su LinkedIn .
No parece que Nash esté muy «escondido», como un vocero de Kickstarter señaló. Sus cuentas en Facebook e Instagram siguen activas. Nash describe a sí mismo como un «veterano experimentado de la industria de la música», en su página About.Me.
Además, su página web www.ednashonline.com, al menos desde España y Colombia, es totalmente accesible: «Ahora, en sus primeros 30 años, Ed está superando claramente a sus compañeros – como Presidente de Gestión de Altius, Ed representa una selecta lista de clientes, ahora sólo en la música, pero en el cine, la televisión, y la comedia», señala la página.
