Golpe de estado del Ejército en Burkina Faso
Militares del Ejército de Burkina aseguraron este pasado jueves que han tomado el control del país y que el presidente, Michel Kafando, retenido desde el miércoles, ha renunciado. Un militar leyó una declaración en la televisión estatal en nombre del denominado Consejo Nacional de la Democracia (CND), y agregó que el Gobierno de transición ha sido disuelto.
«Las fuerzas patrióticas y democráticas, compuestas por todos los sectores de las nación y reunidas en el seno del CND, han decidido terminar con el régimen de la transición», afirmó el militar.
En su declaración también condenó la gestión realizada por el Gobierno de transición y las medidas adoptadas, incluidas las de la ley electoral, que rechaza las candidaturas de los afines al expresidente Blaise Compaoré, que dimitió y huyó tras protestas masivas a finales del año pasado
«La ley electoral, hecha a medida para ciertos individuos y denunciada por las autoridades y las organizaciones de derechos humanos, se camufla como una herramienta para negar a nuestro pueblo de unos valores fundados en el espíritu de la justicia, la igualdad y la tolerancia», dijo el militar. «Esta ley crea una división y una grave frustración en el pueblo porque instaura dos clases de ciudadanos», añadió.
La Unión Europea (UE) ha pedido este jueves la «liberación inmediata» del presidente y el primer ministro, Isaac Zida, que fueron trasladados el miércoles a un campamento militar en la capital, Uagadugú, por miembros de la guardia presidencial.
«Los acontecimiento en Burkina Faso, con el secuestro del presidente de la Transición y de otros ministros, ponen en riesgo la transición y el camino hacia las elecciones del 11 de octubre próximo», señaló en un comunicado la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini.
La política italiana recordó que «cualquier intento de derrocar a las autoridades de la transición por fuerza o acción en contra de la paz y la seguridad del país han sido condenados por el conjunto de la comunidad internacional». «La UE insta a la liberación inmediata de las personas retenidas y al respeto de la transición y del interés general», señaló la jefa de la diplomacia europea, Federica Mogherini, en un comunicado.
Burkina Faso estaba llamada a celebrar elecciones en octubre para poner fin a la transición civil iniciada hace un año, tras las protestas que pusieron fin a casi tres décadas de dictadura de Blaise Compaoré, tras el asesinato del expresidente Thomas Sankara.
En los últimos meses, la tensión ha aumentado en el país por la aprobación de un nuevo reglamento electoral que impide presentarse a quienes apoyaron la propuesta de Compaoré para enmendar la Constitución y aspirar, así, a un quinto mandato.
El presidente y el primer ministro de Burkina Faso son llevados a un campo militar
Miembros de la guardia presidencial de Burkina Faso han abierto fuego sobre los manifestantes que intentaron marchar hacia el palacio presidencial en la capital, Uagadugú, para exigir la liberación del presidente del país, Michel Kafando, y el primer ministro, Isaac Zida.
Los líderes de la transición de Burkina Faso, cuyas elecciones están previstas para el próximo 11 de octubre, fueron «tomados como rehenes» esta tarde por soldados del Regimiento de Seguridad Presidencial (RSP), confirmó el presidente del parlamento de la transición, Moumina Cheriff Sy.
Tras permanecer retenidos varias horas junto a algunos ministros, Kafando y Zida fueron trasladados a un campamento militar próximo al palacio presidencial.
Poco después, el presidente de la asamblea y organizaciones de la sociedad civil llamaron al pueblo burkinés a movilizarse para reclamar la liberación de sus mandatarios, como ya hicieran hace un año en multitudinarias manifestaciones que forzaron la dimisión del exdictador Blaise Compaoré.
Por su parte, el secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, se declaró este jueves «escandalizado» por estas detenciones y exigió su liberación inmediata, una petición que secundaron los 15 miembros del Consejo de Seguridad. «Este incidente es una violación flagrante de la Constitución y de la carta de transición de Burkina Faso», dijo Ban a través de un comunicado de su portavoz, en el que ofreció todo su respaldo al Gobierno.