Parlamento de Donetsk pide cese de operación en este ucraniano
El legislativo de la región ucraniana de Donetsk demandó hoy a la Suprema Rada (Parlamento) el cese de la operación militar de castigo en el este del país, tras advertir sobre un conflicto social sin precedentes.
Los diputados del vasto territorio industrial y minero del Donbass advirtieron en un comunicado a la Rada que la agudización de la confrontación y el deterioro de la situación a causa de las acciones militares a gran escala amenazan con revertir el escenario en un conflicto social de consecuencias irreversibles.
El llamamiento incluye un inmediato cese de las acciones militares, iniciadas a mediados de abril, y una retirada de las tropas de las regiones que declararon una rebelión contra las autoridades golpistas de Kiev y reclaman un referendo de federalización en el país.
Las llamadas acciones antiterroristas minaron el proceso de paz, iniciado por el partido de las Regiones y la agravada situación obliga a remitirnos con un reclamo a la Rada de una inmediata suspensión de la operación, subraya el texto difundido por el órgano legislativo local.
Unido a ello, representantes de la autoproclamada República Popular de Donetsk expresaron la disposición a dialogar con la llamada junta de Kiev solo en caso de que cesen las operaciones de castigo en el territorio, según activistas de las autodefensas, citados por medios rusos de prensa.
Líderes de las milicias populares confirmaron vía telefónica al Primer canal de la televisión rusa que analizarán este jueves la propuesta formulada ayer por el presidente Vladimir Putin de aplazar la celebración del referendo de autodeterminación (del 11 de mayo), para propiciar un amplio diálogo nacional de cara a una solución política del conflicto ucraniano.
Uno de los líderes dijo que un consejo popular conjunto de las regiones de Donetsk y Lugansk decidirá hoy sobre la pertinencia de postergar la consulta, cuando prácticamente concluyeron los preparativos y están listas las boletas para la votación, agregó.
En Kiev, el autodesignado presidente y titular de la Rada Alexander Turchinov declinó cualquier posibilidad de llevar a cabo negociaciones con líderes de quienes tildó de «partidarios armados de la federalización, en el este del país».
Según una nota del servicio de prensa presidencial, Turchinov estaría dispuesto a dialogar solo con simpatizantes pacíficos de la federalización, actitud que contrasta con la asumida hasta ahora desde que los dirgentes de las protestas en Donetsk, Járkov, Lugansk y otras ciudades del sureste ucraniano demandaron pacíficamente que Kiev escuche los reclamos de la población de esas regiones.
El propio Turchinov cerró las puertas a una posibilidad del referendo y de una federalización en Ucrania, y en lugar de convocar una mesa de diálogo como estipularon los acuerdos suscritos en Ginebra el 17 de abril, firmado también por Ucrania, decretó la fase activa de la operación de castigo contra las regiones rebeldes.
Protagonista junto a sus aliados de los partidos fascistas Svoboda y Sector Derecho de las revueltas violentas que derivaron en golpe de Estado, en febrero pasado, Turchinov desmintió asimismo que el operativo en el este fuera una operación de castigo, en respuesta a las denuncias del presidente ruso, Vladimir Putin, quien llamó ayer a Kiev a cesar con esas acciones represivas y propiciar las condiciones para el diálogo.
En paralelo a los focos de resistencia y confrontación con las fuerzas regulares en Kramatorsk, Kontantinovska y Slavyansk, en la región de Donetsk, las tensiones se recrudecieron esta semana en las ciudades vecinas de Mariupol y Odessa, donde el 2 de mayo, un incendio intencional por combatientes de Sector Derecho causó al menos 46 muertos y más de 200 heridos, según cifras oficiales.
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