El Infierno Alemán no fué para el Real Madrid sino para el Bayer.
El Real Madrid golpea con Palizón a el Bayern en la vuelta de semifinales de la Champions.
Una Noche Histórica vivió el Real Madrid en Múnich al ganar 0-4 en el Allianz Arena donde brilló un Ancelotti que se mostró orgulloso de los suyos de poder jugar la final de la Champions y donde reconoció que lo lograron con absoluto merecimiento y donde un Pep Guardiola reconoció su parte de culpa en la eliminación.
A Lisboa por la puerta grande, aplastando al campeón de Europa. El infierno de Múnich no fue tal y el fuego del Bayern lo apagó el mejor Real Madrid de la temporada con una exhibición de fútbol que será recordada durante años. La final de la Champions, doce años después, ya es una realidad. El dominio del Bayern fue, otra vez, artificial. Toque para un lado y para otro, mucho movimiento de balón, pero sin sentido, sin llegadas de peligro ni tiros a puerta.
El Madrid se dejó dominar consciente de que su baza era matar al contragolpe, pero esta vez no se dejó acorralar. Trató bien el balón y salió con mucho criterio, con una autoridad desconocida en Alemania. El Bayern, sin ideas ni ocasiones, fue muy inferior al Madrid El héroe del partido fue, sin duda, Sergio Ramos. Y es que la venganza es un plato que se sirve frío, muy frío. El penalti fallado ante el Bayern hace dos años y las mofas sufridas son una espina que permanecía en el corazón del sevillano con mucho dolor. En un córner, un cabezazo del central, imperial, se convirtió en el primer tanto del partido y Serio Ramos no se conformó con hacer un tanto e hizo el segundo otra vez imponiéndose por alto y conectando un testarazo que le convirtió en héroe absoluto.
La desesperación llegó a los alemanes, que se vieron superados una y otra vez por los soberbios contragolpes de su rival. Cada robo era una ocasión de peligro, un ataque al corazón para Guardiola, imponente desde la banda. Una majestuosa jugada en tres toques dejaba a Gareth Bale mano a mano ante Neuer y el galés decidió regalar el gol a Cristiano ante el asombro del público del Allianz, ya derrotado.
Ante la euforia de los blancos y el asombro del público del Allianz, derrotado. Un equipo Alemán que queda tocado al sufrir la goleada de los blancos que supone la mayor derrota como local en la historia del Bayern en Europa y la de Guardiola como técnico.
El Real Madrid volverá a jugar una final de la Liga de Campeones 12 años después. Es el premio obtenido tras haber eliminado al Bayern de Múnich en semifinales. Los blancos están a 90 minutos de la anhelada Décima. El madridismo no se veía en una así desde 2002, cuando se impuso en Glasgow al Bayer Leverkusen por 2-1. De aquel equipo, todavía queda un jugador en la plantilla, Iker Casillas. El ‘Santo’ blanco volverá a defender la portería madridista en busca de la que sería la tercera Champions de su palmarés.
Con los deberes hechos, a los de Ancelotti ya sólo les queda por saber quién será su rival en Lisboa. Entre el Chelsea de Mourinho y el Atlético de Simeone está la cosa.