Con 1.200 bailarines y más de 700.000 personas como público, se gozaron el Salsodromo de Cali.

Luces y descargas de timbales y trompetas, bailarines, con sus movimientos salseros fueron los encargados de abrir la famosa y tradicional Feria de Cali.

Las bellas mujeres Caleñas, con sus trajes brillantes y metalizados, llenos de lentejuelas y canutillos y  hombres, con sus atuendos multicolores asombraban a visitantes con sus movimientos salseros al estilo inigualable de los caleño amantes de la salsa.  ‘Cali, capital de la alegría’ fue la consigna generalizada para esta apertura de feria, con más de  700.000 asistentes de ellos 16.000 en las graderías que se colocaron a lo largo de  la autopista Suroriental de la Capital Vallecaucana,  marcó el inicio de la Feria de Cali en su edición numero 57.

La apertura del desfile estuvo a cargo de la banda marcial Brigada 145 Los Xionas que, a ritmo del tradicional Cali ají compuesto por el maestro Jairo Varela ya fallecido dio el punto de lanzamiento de estos dias de alegria y diversion en el marco de una de las ferias más prestigiosas no solo de Colombia sino del contienente donde visitantes de cali, disfrutan del tradicional Feria de Cali. Las carrozas iba acompañada de un poco más de 200 bailarines, en honor a la magia, a la vieja guardia, a la alegría y al típico bailador caleño, con una propuesta donde los danzantes usaban zapatos de charol, inmortalizando a los verdaderos rumberos de la vieja guardia.

En total fueron 1.200 bailarines de 25 escuelas de la ciudad los que engalanaron el desfile, que aunque se inició una hora y media después de lo previsto, sobre las 6:30 de la tarde, mantuvo a miles de caleños y visitantes en una autopista de 1,5 kilómetros bailando y disfrutando de la musica y el sabor Caleño.  La apertura de la Feria de Cali tuvo también un tributo a Edulfamid Díaz, conocido como Piper Pimienta. En su honor se levantó una escultura en el barrio Obrero, que fue presentada las 10:30 de la mañana, con la presencia del alcalde de Cali, Rodrigo Guerrero; el diseñador de la escultura, Diego Pombo; el escultor de la obra, Wilmer Ramírez, y la viuda del fallecido artista oriundo de Puerto Tejada (Cauca), Alba Inés Astudillo.

Luz Adriana Latorre, gerente de la Corporación de Ferias, Eventos y Espectáculos de Cali , destacó que las flores que adornan el pedestal donde se encuentra erguida la estatua hacen referencia al mayor éxito de Piper, un hito de la salsa de Cali que enaltece la belleza de la mujer caleña. La escultura, de 4,50 metros de altura, tuvo un costo cercano a los 150 millones de pesos. Un largo traje blanco, sombrero y gafas, además de un micrófono en la mano serán la manera de recordar a este grande de la salsa.